La producción de litio en Argentina creció un 56,7% en julio de 2024 en comparación con el mismo mes del año anterior, alcanzando las 4.991,1 toneladas de carbonato de litio, según el Índice de Producción Industrial Minero (IPIM) del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
En lo que va del año, el acumulado muestra un incremento del 62,3% y aunque el crecimiento es considerable, es menor que el registrado en junio, cuando la producción había subido un notable 128,2%.
Pese a ello, las empresas del sector observan el fuerte descenso en los precios internacionales del litio, que actualmente cotiza a 10.483 dólares por tonelada de carbonato de litio equivalente (LCE), muy por debajo de los 80.909 dólares alcanzados en noviembre de 2022.
Factores detrás de la caída del precio del litio y una predicción positiva para 2027
El desplome en los precios se puede explicar en el exceso de oferta y una menor demanda de vehículos eléctricos a nivel global, uno de los principales destinos del mineral para la producción de baterías. Así, la eliminación de los subsidios para la compra de autos eléctricos en China también contribuyó a la contracción del mercado.
En este contexto, las empresas mineras han comenzado a aplicar estrategias de reducción de costos para mantener la viabilidad de sus proyectos. Aunque el mercado enfrenta desafíos, un reciente informe del economista Maximiliano Ramírez, subsecretario de programación macroeconómica en el Ministerio de Economía de la Nación, sostiene que las perspectivas de precios mejorarán en los próximos años.
Ramírez señaló que el mercado del litio es pequeño en comparación con otros metales, lo que lo hace susceptible a variaciones abruptas. Aun así, el especialista proyecta que los precios se estabilizarán y alcanzarán un promedio de 20.800 dólares por tonelada entre 2025 y 2027, un 53% más que el promedio histórico entre 2005 y 2023.
Inversiones extranjeras y expansión en la Argentina para el sector minero
A pesar del contexto desafiante, el gobierno argentino y las mineras extranjeras mantienen altas expectativas para el sector. La inversión en proyectos de litio sigue en expansión y uno de los más destacados es el avance de la empresa surcoreana Posco, que invertirá 2 mil millones de dólares en el Salar del Hombre Muerto, ubicado en la provincia de Salta.
Además, la francesa Eramine Sudamérica, en sociedad con la china Tsingshan, inaugurará la primera mina de litio en el salar Centenario-Ratones y proyecta una segunda instalación con una inversión adicional de 800 millones de dólares. La empresa china Ganfeng, líder en la producción de baterías, también evalúa una inversión de mil millones de dólares en su proyecto Mariana, en el Salar Llullaillaco.
El Informe de Gestión presentado por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, estima que la finalización de estos proyectos inyectará alrededor de 47.100 millones de dólares en la economía argentina en los próximos años, consolidando al país como uno de los principales productores de litio a nivel mundial.
No obstante, para finales de 2024 se espera que la producción total de carbonato de litio en la Argentina supere las 80 mil toneladas, lo que representaría un salto significativo en comparación con las 44 mi toneladas producidas el año pasado y marcaría un aumento del 373% en la producción proyectada para los próximos cinco años, consolidando al país como un jugador clave en el mercado global del litio.