Fiel a su espíritu emprendedor, y en línea con su filosofía de seguir sorprendiendo a sus clientes, La Casa Blanca de Habana incorpora un nuevo postre a su carta: un helado estilo soft de crema de avellanas, una creación fresca que llega justo a tiempo para los días más cálidos.
Se trata de una propuesta heladera preparada en máquina soft, con textura cremosa y ligera, servido en un vasito estilo sundae, coronado con praliné de maní tostado y salsa de caramelo . El resultado es un postre equilibrado y reconfortante, que mantiene la impronta casera y el sello de calidad que caracteriza a esta pizzería del barrio porteño de Villa Pueyrredón.
“Queríamos sumar algo nuevo, seguir creando y mantenernos en movimiento. Es parte del espíritu emprendedor del equipo”, cuenta Walter García Díaz, uno de los dueños del local.
Con esta incorporación, La Casa Blanca de Habana refuerza su propósito de ofrecer productos de consumo masivo con elaboración artesanal, desde sus pizzas de masa madre hasta su popular torta de ricota de la nona Elena y este novedoso helado, donde cada detalle es creado en el propio lugar por su equipo de trabajo.
Ubicada en la esquina de Nazca y Habana, esta pizzería 100% a leña combina la tradición porteña con la técnica napoletana, convirtiéndose en un punto de encuentro para vecinos, familias y amigos del barrio.
En línea con su idea de seguir sorprendiendo a sus clientes con productos nuevos, La Casa Blanca de Habana continúa ampliando su propuesta sin perder su esencia: brindar calidad, sabor y calidez en cada detalle.
